DREAMS OF A PRINCESS

De niña soñaba con aquel príncipe azul el cual como si fuese en un cuento de hadas; era perfecto me rescataba de castillos encantados, de brujas malévolas y de dragones furiosos… yo en mis sueños era una princesa, de esas que danzaban al compás de la dulce música
Esos eran mis sueños de niña pero tal cual digo son sueños y es que en la realidad todo es muy distinto y a modo quizás de llevar esos sueños a la realidad los hice participes de mi propia historia (mi cuento) donde los príncipes no son ficticios si no hombres de verdad.
En algún momento de mí vida aplique tanto este sueño que me llegue a confundir y a la persona que compartiese mi corazón en ese momento le llegue a dar mas de un dolor de cabeza con mis exigencias es que lo perfecto de mis sueños lo quería en la vida real. hasta que ya mas crecidita me doy cuenta que estar toda la vida soñando con un príncipe azul es solo perder el tiempo e inevitablemente no querer dejar la niñez atrás y con esto no digo que no sea bueno soñar simplemente que yo tomo todo esto y lo aplico a la vida real, a lo terrenal. Ejemplos el llamado príncipe azul no es mas que aquel macho que reúne las condiciones ideales que uno apetece (simpatía, carácter, educación, etc.) ahora pasa a ser mi cuasi príncipe al que acepto con errores y virtudes, eso de los castillos embrujados de mis sueños son corazas emocionales y que busco erradicar de mi, las brujas malvadas son temores y situaciones que me atacan de vez en cuando y asi muchas cosas mas, es así que logre dejar de soñar con lo imposible y deje de decir las típicas frases “todos los hombres son iguales, espero que llegue mi príncipe azul” y me concentro en lo real y doy gracias por cruzar en mi camino el grandioso sentimiento llamado amor y a mi cuasi príncipe.

ahora si soy la princesa mas felis del mundo que vive en lo real que tiene sueños ylos tra de realisar basados en mi tipica ley "LOS PIES SOBRE LA TIERRA"....END